Cuantos más discos tengas, mayor será tu problema. Muchos se han arrepentido de no tomar suficientes precauciones a la hora de hacerlo. Por eso, y hablando desde la experiencia, les recomendaremos distintos modelos de cajas para discos de vinilo que seguramente les podrán sacar de un apuro
En lo que se refiere al transporte, las cajas de metal y de plástico duro utilizadas por los DJ son las más seguras. En nuestra opinión, es indispensable tener alguna, te dediques o no a pinchar discos. Quien diga lo contrario, seguramente nunca ha visto cómo se rompe una caja de cartón llena de discos o cómo se filtra agua en una caja de fruta, doblando los discos por estar mal apilados.
Es cuestión de estética y materiales. Si utilizas una caja de plástico blando, puede que al final sea lo mismo que usar una de cartón, ya que tendrás las mismas posibilidades de que se rompa. En cuanto a la estética, es cuestión de gustos. Les hablaremos de dos vertientes del mercado: las modernas y las vintage. Elegirás dependiendo de tus necesidades y preferencias.
Si necesitan cajas para discos de vinilo y les darán mucho uso, lo mejor son las de DJ. Por ejemplo, este modelo de caja de Jack and Cable, reforzada con fibra de aluminio y recubierta en su interior con material esponjoso para evitar deformidades en sus discos, es una de las mejores opciones que hemos visto. Tiene unas dimensiones de 36 x 38 centímetros y una capacidad para más de 100 discos respetando la holgura recomendada.
También hay modelos con algo menos de capacidad, como las de 70 discos, pero con las mismas prestaciones. Por ejemplo, la caja de Electronic Center cuenta con refuerzos de metal en sus esquinas.
Si les parece demasiado grande, otra buena opción son modelos con menor capacidad, fabricados con materiales algo más simples pero que cumplen su función. Un ejemplo son las cajas de Resident DJ, muy bien valoradas por sus usuarios. Estas cajas tienen capacidad para 70 discos y están disponibles en varios colores.
Como consejo, si no están satisfechos con el interior de estas cajas o consideran que tienen demasiada holgura, pueden realizar un poco de bricolaje. Compren espuma amortiguadora y colóquenla en el interior. Apenas costará unos euros, y sus discos estarán mucho más protegidos.
Sobre gustos no hay nada escrito, y puede que los modelos anteriores no sean de su agrado. Por suerte, también hay fabricantes que diseñan cajas con un estilo vintage, muy relacionado con el mundo del vinilo. Tal vez no sean tan seguras, pero funcionan perfectamente como elementos decorativos para el hogar.
Entre los modelos más destacados, se encuentra una caja de cuero marrón de la marca Ricatech, con capacidad para 30 discos y esquinas de plástico duro. También está disponible en negro. Otra opción interesante es la caja de la marca Steepletone, con la misma capacidad y refuerzos metálicos en las esquinas, aunque su acabado es menos estético.
Aunque no recomendamos el uso de cajas de cartón o plástico blando de forma habitual, en algunas ocasiones pueden ser útiles. Por ejemplo, durante una mudanza, estas cajas pueden sacarte de un apuro. Sin embargo, es fundamental tener mucho cuidado.
Una opción interesante son los clasificadores para pocos discos, que permiten guardar álbumes sin fundas y transportarlos sin forzar demasiado el material. Recuerda que el mayor inconveniente del cartón es su poca resistencia al peso y a la humedad. Por eso, no pongas demasiados discos dentro, por muy grande que sea la caja. Además, asegúrate de que cada disco esté cubierto con una funda de plástico para mayor protección. Os aconsejamos algunas modelos muy económicos que hemos visto en Amazon.